Tras arder siempre, nunca consumirme; y tras siempre llorar, nunca acabarme; tras tanto caminar, nunca cansarme; y tras siempre vivir, jamás morirme.
Después de tanto mal, no arrepentirme; tras tanto engaño, no desengañarme; después de tantas penas, no alegrarme; y tras tanto dolor, nunca reírme;
En tantos laberintos, no perderme, ni haber, tras tanto olvido, recordado, ¿Qué fin alegre puede prometerme?
Antes muerto estaré que escarmentado: Ya no pienso tratar de defenderme, sino de ser de veras desdichado. (Quevedo) |
Holaaa claro q estoy vivooo lo q pasa es q dej� el blog solo por varios meses y ahora estoy de vueltaaa.. q bueno q te acordaste de mi y aparecisteee pa estemos m�s en contacto..cambiasteee hhhh tb lo hice yo, espero te haya gustado mi cambio jajaja Te dejo un abrazo enorme y estemos en contactooooo